|
Un gavilán. Ilustración de Hebe Uhart
|
Terminé el libro ANIMALES de la escritora argentina Hebe Uhart (1936-2018).
Lo compré poco después de la muerte de Hebe. Estaba en la mesa de novedades de una librería en Buenos Aires y lo compré por varias razones.
1. Porque era de Hebe y Hebe me gusta.
2. Porque a Hebe le encantaban los animales.
3. Porque sus dibujos (el libro tiene pequeñas ilustraciones muy simpáticas hechas por la autora) me hicieron acordar a mi madre que también dibujaba animales, sobre todo dibujaba pájaros.
4. Porque entre estos dibujos hay un Churrinche y un Pirincho y yo tenía dos tíos muy divertidos que llevaban esos sobrenombres.
5. Y porque hojeando el libro, caí en una página (61) que decía: A mi me interesa saber cómo duermen los animales. A veces pienso, el cerdo, ¿dormirá acostado? ¡y me encantó!
ANIMALES son pequeñas historias, con un fino sentido del humor, sobre animales, sobre dichos camperos, sobre gente que ama a los animales, sobre leyendas, libros, estudiosos, sabios, autores varios, gente común que pasea su perro por las plazas, curiosidades y preguntas (algunas insólitas y otras no tanto) sobre animales. Son relatos que se leen como si estuviéramos paseando con Hebe y hablando francamente de lo que ve, de lo que siente, de lo que le interesa, de lo que hacen los animales. Se leen como si ella misma estuviera caminando despreocupada, contando en voz alta las rarezas, originalidades y caprichos de los animales. En este libro hay loros, monos en todas sus variantes, osos hormigueros, pájaros, clases magistrales, encuentros, algún viaje y datos, para mi, asombrosos que me hicieron sonreír a todo momento.
A medida que iba pasando las páginas asociaba dichos que, aunque no están en el texto, solo con ver el dibujo de Hebe del chorlito me acordaba de la expresión "cara de chorlito" o al ver al chimango pensé en la expresión "gastar pólvora en chimango" o me acordé cuando mi madre nos decían que nuestros cuartos parecían "nidos de carancho" o que dejáramos de gritar como "urracas".
Y antes de terminarlo, volví a las primeras páginas donde encontré otra buena razón, quizás la mejor, para comprar el libro de Hebe:
"Los animales y las plantas están en este mundo para servirnos de ejemplo"
(Frase de Eliano, autor del siglo II en su Historia de los animales)
Como siempre, transcribo y comparto algunos párrafos que me gustaron.
"... Onelli acostaba personalmente a su mona preferida, Jacoba, y escribe: "Mientras le arreglo con prolijidad sus mantas para que no sufra frío, en el momento mismo que siente que la voy a abandonar, se tapa inmediatamente la cabeza con sus covertores, encogiéndose toda. Si destapo la manta, la veo con los ojos desmesuradamente abiertos, entonces le descubro la cabeza, me fumo un cigarrillo al lado de ella, y ahí recién se duerme".
(Clemente Onelli fue director del jardín zoológico de Buenos Aires en 1905)
"...En su texto "Colibrí levitador" cuenta que conoció una especie nueva, la mencionada. Y dice: "Mis colegas de la Academia Británica de Ciencias han pensando erradamente que su desenfrenado aleteo es el que hace que su corazón palpite tan rápido. Ahora estoy seguro de que su corazón bate mil veces por minuto por causa del amor que siente por las aves del paraíso"..."
(En referencia al ornitólogo inglés Sir William McCrow que su obsesión por encontrar el pájaro de los mil cantos lo llevó a recorrer el mundo entero durante 60 años, descubriendo decenas de maravillosas criaturas jamás vistas)
Mis comentarios son los de una simple lectora.
Comentarios