Días atrás, el diputado radical Suárez Lastra dijo en Twitter: “El abuso sexual no es un pecado que se absuelve en el confesionario, es un delito que se purga en la cárcel ” y me pareció tan justo que no pude más que compartirlo.
Que me perdone Dios pero desde que estallaron los últimos inmensos escándalos sobre curas pederastas y abusadores pensé en los muchos comentarios-notas que leí los últimos días y que están poniendo el acento en que el problema es (que todos sabemos que no es una novedad) el celibato y/o el voto de castidad.
Ojalá fuera tan sencillo para terminar con los malos hábitos y pensamientos. Los casamos, peace&love y listo! Solucionado el problemita.
O yo estoy loca o ciega o sorda o muda o soy imbécil pero frente a los horribles, imperdonables, canallescos , monstruosos abusos sexuales por parte de “miembros de la Iglesia” , me pregunto si alguien con algo de cabeza puede pensar, imaginar siquiera, que esos degenerados (las cosas por su nombre) que abusaron y abusan, durante años, que violaron y violan a niños, que engañaron y engañan, escondieron y esconden, arruinaron y arruinan vidas, pueden ser “personas normales" solo por abandonar el celibato o dejar de ser castos y ocuparse de una familia.
A ver... hay que ser bruto, muy bruto para creer que se los arreglaría con un matrimonio, con el amor libre, con la oportunidad de formar una linda familia con el sexo que se les de la gana.. esos “representantes de la Iglesia” lo único que merecen, lo que están vivos aún, es la cárcel de por vida y que vayan a rezar a un rincón de una celda oscura, negra, bien negra, bien oscura, bien profunda porque no hay perdón que valga.
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