"Señoras, señores, compañeros, ¡amados niños! ¡No nos dejemos arrebatar la eñe! Ya nos han birlado los signos de apertura de interrogación y admiración (...) ya nos han traducido el pochoclo (...) ¿Quieren decirme que haremos con nuestros sueños? Entre la fauna en peligro de extinción ¿figuran los ñandués ?(...) ¿Qué será del Año Nuevo, el tiempo de ñaupa? (...)
"La ortografía también es gente", escribió Fernando Pessoa, y como la gente, sufre variadas discriminaciones. Hay signos y signos, unos blancos, altos y de ojos azules como la W o la K. Otros pobres morochos de Hispanoamérica como la Ñ (...) que está en peligro de pasar al bando de los desocupados después de rendir tantos servicios (...) sigamos siendo dueños de algo que nos pertenece, esa letra con caperuza (...) que es algo importante, algo gente, algo alma y lengua, algo no descartable..."
Comentarios